Marzo 21 de 2018

La OPS/OMS advirtió que, ante los brotes de sarampión reportados durante los últimos meses en las Américas, los países deben redoblar esfuerzos para vacunar a sus poblaciones, fortalecer la vigilancia para detectar posibles pacientes y poner en marcha medidas para responder rápidamente ante cualquier caso sospechoso.

La región fue declarada libre de rubéola y del síndrome de rubéola congénita en 2015, y del sarampión en 2016 por un Comité Internacional de Expertos. La eliminación de estas tres enfermedades fue el punto culminante de un esfuerzo de 22 años que incluyó la vacunación masiva contra el sarampión, la parotiditis y la rubéola en todo el continente. Sin embargo, como el virus del sarampión es sumamente contagioso y sigue en circulación en el resto del mundo, al igual que el virus de la rubéola, la región está en riesgo de que ocurran brotes de estas enfermedades.

En los primeros meses de 2018 son nueve los países que han notificado casos confirmados: Antigua y Barbuda (1 caso), Brasil (14 casos), Canadá (4 casos), Colombia (1 caso), Estados Unidos de América (13 casos), Guatemala (1 caso), México (4 casos), Perú (2 casos) y Venezuela (886 casos en total, 159 en 2018), señala la OPS.

Ante esta situación, la OPS/OMS recomienda a sus países:

  • Vacunar para mantener coberturas homogéneas del 95% con la primera y segunda dosis de la vacuna contra el sarampión, la rubéola y las paperas (SPR), en todos los municipios.
  • Fortalecer la vigilancia epidemiológica para detectar casos sospechosos en los servicios de salud públicos y privados.
  • Brindar una respuesta rápida al detectar casos importados de sarampión para evitar el restablecimiento de la transmisión endémica del virus, incluyendo la activación de equipos que den seguimiento a los casos y sus contactos.
  • Mantener una reserva de vacuna sarampión-rubéola (SR) para acciones de control de casos importados en cada país de la región.

¿Qué es el sarampión?

Es una de las enfermedades más contagiosas y afecta en particular a los niños. Se transmite por gotitas procedentes de la nariz, boca y faringe de las personas infectadas. Los síntomas consisten en fiebre alta, erupción generalizada en todo el cuerpo, congestión nasal, ojos enrojecidos.

No hay tratamiento específico para el sarampión, y la mayoría de los pacientes se recuperan en 2 o 3 semanas. Sin embargo, puede causar complicaciones graves, tales como ceguera, encefalitis, diarrea intensa, infecciones del oído y neumonía, sobre todo en niños con problemas de nutrición y pacientes inmunodeprimidos.

El sarampión es una enfermedad prevenible mediante vacunación. 

Fuente: OPS/OMS

Enlaces:

http://www.paho.org/col/index.php?option=com_content&view=article&id=2923:la-ops-reitera-su-llamado-a-vacunar-contra-el-sarampion-para-mantener-su-eliminacion-en-las-americas&Itemid=487

OPS Actualización epidemiológica sobre sarampión (16 de marzo 2018): http://www.paho.org/hq/index.php?option=com_docman&task=doc_view&Itemid=270&gid=44093&lang=es

OPS Sarampión: http://www.paho.org/hq/index.php?option=com_content&view=article&id=10407&Itemid=1711&lang=es