Emergentes y Reemergentes
La situación social de Venezuela y la masiva migración de sus nacionales a Colombia trae consigo diferentes retos y oportunidades para este país.
Las enfermedades emergentes y reemergentes son unos de los riesgos. El sarampión es un ejemplo. En Colombia su incidencia ha tenido un incremento reciente luego de que el país fue declarado libre de circulación de virus autóctono desde el 2002. Entre la semana epidemiológica 10 de 2018 y la 30 de 2019 se notificaron 10.305 casos sospechosos de los cuales 383 fueron confirmados, incluida una defunción. Al parecer pacientes foráneos o importados.
El genotipo del virus identificado (D8) lo muestra similar al que está circulando en Venezuela y en otras naciones de la región de las Américas. Estados Unidos, Brasil y Venezuela son los países en los cuales se ha presentado mayor incidencia de la enfermedad. En el nuestro, los casos confirmados en 2019 han sido reportados en Atlántico, Cesar, Córdoba, Cundinamarca, La Guajira, Norte de Santander y los Distritos de Barranquilla, Cartagena y Bogotá.
En 1995 sufrimos en La Guajira una gran epidemia de encefalitis equina que se mezcló con numerosos casos de sarampión. Fue consecuencia de la ineficiencia y la falta de alerta oportuna del sistema de vigilancia epidemiológica de Venezuela, a lo que se sumó la cultura poli-domiciliaria de la comunidad indígena Wayúu con residencia a ambos lados de la frontera, la que atravesaban sin control. Hoy la presión desde Venezuela es mucho mayor y Brasil no se puede descuidar.
El desplazamiento de más de un millón de venezolanos a nuestro territorio en el último año y medio, genera amenazas sobre las condiciones de seguridad ciudadana, el mercado laboral y la sanidad de la población. El manejo dado a esa avalancha humana es digno de felicitación. En su inmensa mayoría, los migrantes se han incorporado al aparato productivo y las organizaciones sociales y del Estado han podido contribuir a aliviarles a los demás su precaria situación.
Nuestro sistema sanitario ha respondido de manera excelente ante la situación. Aun así, se debe redoblar el esfuerzo de nuestra vigilancia epidemiológica.
Augusto Galán Sarmiento. MD. MPA
Director del Centro de Pensamiento Así Vamos en Salud, Ex ministro de Salud