La variante Delta

Augusto Galán Sarmiento MD.

Director de Así Vamos en Salud y Exministro de Salud.

La replicación de un virus RNA se halla propensa a los errores. Pueden existir muchos mutantes ligados genéticamente o a genomas anómalos truncados. En pocas palabras, y menos enredadas, los virus RNA producen variantes que pueden o no ser más agresivas que el original. Este SARS-CoV- 2 no es la excepción. En lo que va corrido desde el inicio de la pandemia se ha señalado la aparición de varias de ellas: Alfa, Beta, Gama y Delta son las más nombradas. La última (también denominada B.1.617.2) se ha tornado en la más preocupante.

De acuerdo con un artículo de Nature publicado en mayo de 2021, esta variante fue detectada en la India en octubre del año pasado en unos pocos casos. Para enero de 2021, había aumentado significativamente su presencia en la región de Maharashtra y en febrero ya tenía una participación del 60 por ciento de los casos reportados en la zona.

El mismo artículo señala que “en un análisis genómico y estructural detallado de B.1.617, publicado como preimpreso el 3 de mayo, los científicos del Instituto Nacional de Virología en Pune (India) identificaron ocho mutaciones en la proteína de la espiga del virus. Dos de ellos se parecen a mutaciones que han permitido que otras variantes de interés se vuelvan más transmisibles, y una tercera se parece a una mutación que podría permitir al virus evadir parcialmente la inmunidad del huésped”.

En pocas semanas se convirtió en la variante predominante en la India y se ha extendido rápidamente a más de 50 países, incluidos Inglaterra, Estados Unidos y otros. El 10 de mayo fue declarada por la OMS como “una variante preocupante”. Hace un par de semanas fue detectada la circulación de la variante Delta en Colombia. Que sea más transmisible, no significa que sea más letal.

En el Reino Unido la variante Delta ha sido la dominante en los meses de junio y julio y por cuenta de ella se ha presentado un tercer pico pandémico en este país que ha llegado a ser equivalente, en número de casos, a un 80 por ciento del segundo pico que tuvieron los británicos durante los meses de diciembre 2020 a febrero 2021. Lo positivo es que todo indica que la amplia cobertura de vacunación que han logrado en el Reino Unido (70 por ciento una dosis, 57 por ciento el esquema completo) parece demostrar su utilidad ya que la mortalidad que han reportado por Covid-19 entre junio y julio, es menor al 10 por ciento de la reportada a principios del año.

En un estudio publicado en el New England Journal of Medicine de julio 2021 se corrobora esta posibilidad, al probar durante esta última etapa de la pandemia la efectividad de las vacunas que más han aplicado en Inglaterra (Astrazeneca y Pfizer). En él concluyen que “solo se observaron diferencias modestas en la efectividad de la vacuna con la variante Delta en comparación con la variante Alfa después de recibir dos dosis de vacuna. Las diferencias absolutas en la eficacia de la vacuna fueron más marcadas después de recibir la primera dosis. Este hallazgo respaldaría los esfuerzos por maximizar la utilización de la vacuna con dos dosis entre las poblaciones vulnerables”

Otros estudios han demostrado la eficacia de los biológicos para disminuir la transmisión del virus. Aunque el contagio por la variante Delta se ha dado mayoritariamente en no vacunados, la eficacia de aquellos se muestra ligeramente menor contra la transmisión por esta variante; sin embargo, las vacunas demuestran aún su alta utilidad y más importante aún, mantienen la efectividad contra los casos severos y la mortalidad.

Así que ante la variante Delta las vacunas sí sirven, y mucho; como también salvan vidas, y muchas. La responsabilidad de los generadores de opinión y con mayor razón de políticos en campaña presidencial es muy grande en esta sindemia, durante la cual la infodemia es una epidemia de la desinformación; y como ya lo dijimos en un artículo pasado, la desinformación mata.

Las medidas de protección individual siguen vigentes mientras Colombia avanza en vacunación y ojalá masifiquemos aún más su implementación en las próximas semanas con más esquemas completos. La ciencia ha demostrado con creces su utilidad. Debemos apelar a la evidencia para emitir los juicios y tomar las decisiones que más nos convengan a los intereses colectivos, siempre alejados de la politiquería y la mezquindad.